This is for anyone with the broken heart.For anyone who cant get out of bed.

martes, 31 de diciembre de 2013

2013 is nearly gone.

No sería propio de mi, en una fecha tan señalada como esta, no blasfemar sobre el tiempo, la distancia, el olvido, y el resto de cosas que yo o cualquiera detesta.

Supongo que me tenéis por una infeliz, caprichosa, inconformista que no hace más que quejarse una y otra vez. En versos, porque es más fácil y  duele menos.
 Así que seguramente también me tengáis por una cobarde. Una ingenua. Una desagradecida que bajo el cielo gris de esta ciudad es incapaz de darse cuenta de la suerte que tiene de tener todo lo que pueda querer.

Pero es en este sucio autobús roído por el paso del tiempo y los mil y un pasajeros que por el han transitado, cuando me pregunto de qué servirá tener todo cuanto deseas cuando no tienes lo que necesitas.
Así como un vagabundo con una nevera vacía.

Déjadme. Son fechas duras para cualquiera. 
Duras para olvidar, y todavía más para recordar.
Tratad de ser felices.
S.


domingo, 15 de diciembre de 2013

fi tahw

Cerré la puerta de casa aquella mañana sin imaginar jamás que cuando volviera, en nada me parecería a la que salió. 
En parte. 
Por suerte. 
Pero me estoy adelantando a los acontecimientos.


Busqué desesperadamente las llaves por el bolso, como cada mañana. Cerré a la vez que trataba de adecentar mi cabello inútilmente. Las agujas del reloj presionaban más que la incesante vocecita en mi cabeza repitiéndome una y otra vez lo tarde que llegaba. ¿Se puede llegar tarde a tu vida? Creo que llevaba haciéndolo veinte años. Sin embargo, eso iba a cambiar. Ese día todo iba a cambiar. 

S.

sábado, 14 de diciembre de 2013

Muñeca.

A veces, y solo a veces, cree que con sus clavículas se marchó la tristeza. Que irónico.
Es como, si de alguna manera, sus costillas se hubieran llevado consigo toda esa culpa e ira en su marcha. Siempre pensó que sería al revés, que los huesos eran una pócima mágica que la sacaría de aquella habitación en la que por más y más que gritaba, nadie parecía escucharla. Cuanto más alto lo hacía, más la ignoraban.
Y, pobre ingenua, no se dio cuenta que lo que ella creía que sería su salvación, terminó siendo su perdición.
Y al final, con sus diminutas muñecas, se marchó poco a poco, el fantasma que se escondía tras sus ojos.

-Jamás llegaréis a comprender lo mucho
que esto significa para mí.
Jamás. 

S.

domingo, 8 de diciembre de 2013

Tratáis de salvarme sin entender lo mucho que necesitáis salvaros.


Hace un año estaba muerta. Justo un año. Y vosotros, ingenuos, me preguntareis ¿como puede eso ser? ¿Si hoy estas aquí como pudiste no haberlo estado?
Y yo suspiraré. Os invitaré a muchos tés y os proporcionaré aún más pañuelos mientras os explico que respirar no es vivir. Que mentir, no siempre es herir. Que el amor no salva. Que las lágrimas más ácidas no las derraman los ojos.Y tantas cosas tendría que explicaros.
Tantas. 
Tantas que prefiero quedarme  callada y sonreír a vuestros halagos. Halagos que nunca emprenderéis. No sabéis nada de lo que aquí reflejo. No sabéis nada ni de vosotros mismos. No vengáis a haceros los héroes conmigo. 
No hoy.
 No nunca.
S.




domingo, 24 de noviembre de 2013






Cada casa, un color. Cada puerta, un mundo. Qué bonita era aquella ciudad, más que nunca en primavera. Las lluvias torrenciales que asolaron el invierno anterior regaron las flores y plantas que hoy florecían. Era así como si lo qué una vez las mató, hoy las devolviera la vida. Como si las ayudara a resurgir de sus cenizas para hacerlas todavía más hermosas. Más fuertes para enfrentarse a la próxima tormenta. Que seguro, llegaría.

S.

miércoles, 20 de noviembre de 2013

Al final, cuando todo acabó, se echaron de menos. Se echaron de menos el uno al otro y, curiosamente, cada uno a sí mismo.


No sé como podéis habar de amor si no le conoceis. Y no sabeis lo que os perdeis.

Dime, ¿acaso crees que no hay trenes que llegan aún más lejos? ¿De veras piensas que hay estaciones al borde de todas las cosas? ¿Crees que un billete de ida no es igual que uno de vuelta? ¿O que en los viajes hay algo más importante que el camino? Dime, ¿de veras crees que la felicidad no es el final de una circunferencia, algo que da vueltas y vueltas y vueltas y nunca termina? Dime, ¿crees que detrás de esos ojos que brillan no hay una luz más potente o un abismo más intenso? Dime, ¿crees en serio que podría ser peor si lloviese, o si después de aquella noche no hubiera manera de volver a arañarte el alma? Dime, ¿piensas que hoy no es mañana? ¿Piensas que el futuro no existe y que el pasado hace mucho que dejó de existir? ¿En serio crees que los sueños han de perseguirse como sueños y no como se persigue el horizonte
Dímelo, dime si de veras crees en todo eso porque, si es así, sé que puedo estar a salvo contigo.

DIEGO ÁLVAREZ MIGUEL



sábado, 9 de noviembre de 2013

Solo con el tiempo.

Después de un tiempo uno aprende la sutil diferencia entre sostener una mano y encadenar el alma.Y uno aprende que el amor no significa acostarse y una compañía no significa seguridad y uno empieza a aprender...Que los besos no son contratos y los regalos no son promesas, y uno empieza a aceptar sus derrotas con la cabeza alta y los ojos abiertos.Y uno aprende a construir todos sus caminos en el hoy, porque el terreno de mañana es demasiado inseguro para planes... y los futuros tienen una forma de caerse en la mitad.
Y después de un tiempo uno aprende que si es demasiado, hasta el calor del sol quema.
Así que uno planta su propio jardín y decora su propia alma, en lugar de esperar a que alguien le traiga flores.Y uno aprende que realmente puede aguantar, que uno realmente es fuerte, que uno realmente vale.
Con el tiempo aprendes que estar con alguien porque te ofrece un buen futuro significa que tarde o temprano querrás volver a tu pasado.
Con el tiempo comprendes que sólo quien es capaz de quererte con tus defectos, sin pretender cambiarte, puede brindarte toda la felicidad que deseas.Con el tiempo te das cuenta de que si estás al lado de esa persona sólo por acompañar tu soledadirremediablemente acabarás deseando volver a estar solo.Con el tiempo entiendes que los verdaderos amigos son contadosy que el que no lucha por ellos tarde o temprano se verá rodeado sólo de amistades falsas.
Con el tiempo aprendes que las palabras dichas en un momento de ira pueden seguir lastimando a quien heriste, durante toda la vida.
Con el tiempo aprendes que disculpar cualquiera lo hace, pero perdonar es sólo de almas grandes.Con el tiempo te das cuenta que aunque seas feliz con tus amigos, algún día llorarás por aquellos que dejaste ir.
Con el tiempo te das cuenta de que cada experiencia vivida con cada persona es irrepetible.
Con el tiempo te das cuenta de que en realidad lo mejor no era el futuro, sino el momento que estabas viviendo justo en ese instante.
Con el tiempo aprenderás que intentar perdonar o pedir perdón, decir que amas, decir que extrañas, decir que necesitas, decir que quieres ser amigo, ante una tumba, ya no tiene ningún sentido, ya es tarde, nunca dejes que algo te sea demasiado tarde.
Pero desafortunadamente, LO APRENDERÁS sólo con el tiempo...

Jorge Luis Borges


domingo, 27 de octubre de 2013

Un año.  365 días. Y hoy, está mas vigente mi sentencia final, la que firmé con mis propias lagrimas por una idea estúpida que aún me atormenta. A mí y a tantos. Un año. Hace, hoy un año me quitaron la venda que tuve en los ojos tantos meses y en vez de curarme las heridas con ella, la usaron como soga.
Y aquí estoy. Colgando aún del árbol. Esperando. Pero no equivoqueis. Nunca esperada, y mucho menos esperanzada. ¿Y como se huye estando atada? ¿Y a donde se huye cuando no se tiene a donde ir?


Ruiz Zafón escribió una vez "Solo desaparece aquel que tiene algún lugar al que ir", así que todos los demás simplemente estamos perdidos. Perdidos en el recuerdo de aquellos ojos con los que me reencontré hace ocho mil setecientas ochenta y cuatro horas, y a los que destrocé por estúpida, por ingenua, por egoísta. Culpable. Culpable. Culpable.


S.

Te odio de Ismael Serrano. Arte.






Te odio. Odio las canciones de amor que traen tu recuerdo a mi casa. Las ganas de verte. Y odio el cielo en tu rostro y las dudas de echarte al olvido o llamarte para contarte, qué sé yo, que sigo existiendo, que te odio por fin, que no sé si el mundo resiste sin ti. Tanto, tanto, tanto, tanto te odio.Te odio. Odio la mañana, el café sin planes, sin ti y en ayunas perdura tu aroma y lo odio. Envuelto en papel de colores te envío bengalas, rencores. Quizá recuerdes así que te odio. También tu sonrisa y la brisa arañando tu piel, y mi corazón ya de paso. Tanto, tanto, tanto, tanto lo odio.Este viejo odio que hiela los jazmines, ama tu figura aborrecible. Y así, si te marchas, quedan los rencores para recordarme las razones de por qué me eres imprescindible, de por qué te extraño aunque me olvides.Te odio. Odio tu belleza y a mí me odio al saberme tan lejos del viejo camino andado rastreando hadas y cometas, la estrella prendida en tu pelo. Maldito lucero. Lo odio. Odio odiarte tanto, saber que te encuentras perdida y la vida me impide encontrarte. 
Tanto, tanto, tanto, tanto te odio.Yo odio perseguir tu rastro, cansado en este laberinto. Cual hilo de Ariadna tus huellas me llevan hasta el dulce tiempo de besos, promesas. Lo odio. Soy tan feliz a tu lado que odio que ya no estés cerca y empieza a cansarme este odio. 
Quizá si tuviera tus manos .Pero te odio tanto, tanto, tanto, tanto.

viernes, 25 de octubre de 2013

Pe {di-fec} ción.



It’s been years
Since we carved our names
On a clocktower door
Before everything changed
We were big eyed boys
With the salt on our skin
And we’d throw our kites to the wind

And they’d fly on and on
It’s been years
Since we whispered soft
With the torch light on
And the big light off
We were tired boys
With the soap on our skin
And we’d fall asleep to the wind
And we’d dream on and on


And in years
When the torch light thins
And the clock tower’s gone
And the big light dims
We’ll no longer be boys
We’ll have lines on our skin
And they’ll throw our dust to the wind

martes, 8 de octubre de 2013

Aunque le arranques los pétalos, no quitarás su belleza a la flor. 
Aunque te despojes de tus vuelo, y grites al cielo, rogando una explicación, buscando una solución.Gritándote a ti misma, ¿por qué es así la vida? 'Que nunca serás bella'  
Que aquello son mentiras, vanidosas, inconscientes,de lo que tú ves al mirar de cerca en el espejo. ¿No te das cuenta?
 No te das cuenta que nada jamás será tan bello como los pliegues de tu piel, los lunares, los surcos trazados de tu cuerpo. Aquello que tú odias no ves que lo anhelo. ¿No ves que no hay mayor belleza que la de tus imperfecciones?
Aquello que aborreces y de lo que te despojas.Yo te digo mira niña eres preciosa. Y tú dices no te creo, yo no te entiendo. 
Arráncate los pétalos. 
Grítale al cielo.
 Haz lo que quieras. 
Pero yo te digo que jamás he visto semblante mas hermoso o corazón mas lleno.


Hoy te miro a la cara y veo lo que sientes. Las lágrimas que derramas por las noches, aquello que te atormenta, tu veneno. Y todo cautiva. Veo tu dolor, y siento tu amor. No te atrevas a decirme que no puedo. Porque no hay nada más bello.



Hoy he recibido esto de parte de un anónimo, y ¿qué puedo decir?
No hay nada más bello que esto.


martes, 1 de octubre de 2013

Cierra la puerta cuando salgas.

Y olvida todo lo que fui, dije o hice. Lo siento. No fue mi intención fallarte de esta manera. La confianza nos llevo a la perdición, y en nuestra perdición nos perdimos. Te perdi, me perdí, te perdiste, me perdiste. Nos convertimos en extraños que compartían toda una vida. Nos convertimos en lo que siempre temimos. Nuestras peores pedadillas llegaron convertidos en nosotros mismos, en una versión cruel, vulgar y desesperada de nosotros mismo. Así que cuando te vayas, que lo harás, olvida lo que estamos viviendo. Este no eres tú, esta no soy yo. Reencuentrate, y puede que algun día me reencuentres. Me reencontraré, y puede que algún dia te reencuentre. Hasta ese día, quedate con lo bueno que  tuvimos : París.

S.

lunes, 30 de septiembre de 2013

Aquel 15 de agosto

Estábamos solos. Eramos dos almas solitarias dentro del mismo antro de música de segunda mano. Las casualidades de la vida nos llevaron a ambos a aquel mismo disco, a hablar durante horas sobre aquel desconocido cantante. ¿Que hacía un chico como tú en un lugar como ese? Te habrías preguntado lo mismo sobre mí, no es normal encontrar a alguien un quince de agosto por las agonizantes calles de ciudad. Un guiño de ojos, esa medía sonrisa, tu extraño gusto musical,  tus cabellos rubios bañados por el sol , tus ojos azules. Todo encajaba en un puzzle de piezas cuadradas.   Por primera vez en mí vida, tiempo no me faltaba, bueno puede que sí, pero no era consciente de las agujas del reloj. Un café, es a todo lo que pensé que llegaríamos,pero todo un día contigo era demasiado, más de lo que soñé, y es que eso era un sueño, era algo intangible, ilógico. ¿Cómo pudimos llegar a conocernos el uno al otro en 12 horas? ¿Cómo pude abrirme tanto a ti, a tu sonrisa? 
Entonces llegó la conciencia, la racionalidad. El reloj de la plaza  marcaba las 22:22. "Pide un deseo pensé" y aunque no creo en esas cosas, que se detuviera el tiempo era lo único que se me ocurría, lo único que deseaba.  Pero no, el tiempo no para por nadie, no espera.  Por eso lo prometimos, vernos en el mismo sitio, en seis meses, y cumpliremos nuestra promesa. 
S.

viernes, 27 de septiembre de 2013

¿Cartas o puñales?

Y mientras estas palabras emanan de mí, mientras son mis manos las que guían mi cerebro y no al revés, aquí estoy yo. Llorando. Desahogándome. Muriendo por dentro. De tristeza, de melancolía, de felicidad y de añoranza al mismo tiempo aunque parezca completamente imposible.

No creo que haya nadie en la faz de la tierra capaz de amar y detestar tanto recibir cartas. Vivimos en una sociedad en el que las palabras han perdido fuerza, poder y sentido. Las olvidamos, las desgastamos y las desaprovechamos. Cuando lo único que tenemos es eso, palabras. No tenemos tiempo. No tenemos vida. No tenemos ni siquiera amor si no tenemos palabras. No nos tenemos ni a nosotros mismos. 

Las culpables de mis lágrimas son las cartas que hoy he recibido, con un único destinatario, con tres dibujos, con mil ochenta y cinco  maneras de destrozarme, de desgarrarme. Cartas de personas que me recuerdan a mi oscuridad, a mi tristeza y mi miedo, pero que al mismo tiempo quiero y querré con todo mi corazón. Personas a las que tuve que abandonar para reencontrarme a mí misma, pero siento que las perdí y me perdí, y ahora sí que estoy sola. Sola y sin fuerzas. Sola y con mil cartas encima de la mesa. Sola y con mis lágrimas, con los sueños que tenía aquel septiembre y que el otoño se llevo con él. Sinceramente, no sé ni que escribir. Ni qué pensar. Las frases, las palabras... cada una retumba en mi cabeza sin dejarme en paz. Cartas. Cartas a mí, o a la que era. A la que fui una vez y siento que ya nunca recuperaré.


Sábado 9 de diciembre del 2012:

A sí que ya sabes, te toca ser fuerte y aguantar, yo sé que tu puedes, eres la persona más fuerte que he conocido. Sé que ser fuerte es agotador y que es más sencillo rendirse, pero a veces hay que sacar las fuerzas de donde no las hay. 

Te lo mereces todo y espero volverte a ver. 


S.





 Why isn’t this the most famous photo from 9/11 instead of the falling man? isn’t two people holding hands after jumping more significant than one man? It makes me wonder what the story is behind this photo, were they friends or lovers? or just strangers who were too scared to jump alone? it shows that people need a helping hand even in their final moments. I for one think they were strangers. Sometimes it’s easier to care for a stranger, how else would they have found the courage to not only jump, but to look into someone’s eyes and jump. I don’t think I could have done that if I knew the person well.





S.

jueves, 26 de septiembre de 2013

{Esperar a alguien en la vía de tren. Ese es el destino}

Giraba la cucharilla de café en el sentido de las agujas del reloj. Inconscientemente. De la misma manera que agitaba la pierna, nerviosa, indecisa, dubitativa. Esperanzada. Esperada.
"Esperar a alguien en la vía de tren. Ese es el destino"
Y no el del trayecto, sino el de su vida. Su vida que hacía años había descarrilado por una vía abandonada, a la deriva, en medio de ninguna parte. En todos sitios. Todo a la vez, y nada en cada uno de los granos de azúcar que muy lentamente se deshacían, bailando, mezclándose, fusionándose con la cafeína de la misma manera que un día ella se fusionó con él. Con cada ápice de su cuerpo, hasta perder la cordura. Tan ingenua como para creer que él, hoy, volvería. Vendría, y no se iría. Jamás.
Ingenua. Inconsciente. Ilusa.

O al menos es lo que pensé, hasta que el reloj de "Westbahnhof" se paró. Al igual que su corazón. Crash. Mil y un pedazos, su taza de café y mi incredulidad. Ambas se rompieron. La concurrida estación paró su ajetreado vaivén para observar aquella taza (o lo que quedaba de ella) y, por supuesto, a aquella pareja de enamorados que, hoy, volvían a encontrarse.

Nadie sabe hasta cuando, y ¿a caso importa?

S.

Le conozco mejor que su almohada, imagínate.


{tú, pequeño desastre}

Haberte llamado persona habría sido menospreciar a toda la especie, o simplemente a ti. Porque ni tu eres humano, ni ellos son tú. Y aún me pregunto que es peor. ¿No respirar o no tener tu sonrisa? ¿No poder amar o no amar jamás de la forma en la que sólo tu puedes hacerlo? ¿No reír o no llorar tus lágrimas?
 Oh si, tú, pequeño desastre, pequeña equivocación, para cualquiera, para todos. Menos para alguien.

S.

sábado, 21 de septiembre de 2013


Hay palabras que nunca seré capaz de decir en voz alta y por eso, a día de hoy, las escribo. Hay veces incluso que mi cabeza me grita por un suspiro y yo le respondo indignada que, robándomelos tu cómo voy a tener suficiente como para regalarlos.
Al escribirlas, quedan guardadas para siempre. Una vez leí en un buen libro que escribir no resucita, entierra. Y qué más dará morir una vez más, echar tierra al asunto y hacer como que soy sin ti, si con solo leerme y verte entre mis letras consigo resurgir un poco más cada día. Menuda estupidez, ¿no crees? Tener miedo a darles voz cuando les doy vida al plasmarlas en un papel.Y cada vez que son leídas, es un pedazo de mí misma que regalo para darles alimento y no sufrir bajas por necesidad. 
Aunque tengo que admitir que hay momentos de debilidad que no soy capaz de contenerme y te digo que te quiero. Ojalá tuviera esa facilidad para decirte todo lo que escribo al oído, pero perdería sentido lo que no está en mis palabras y se encuentra escondido entre paréntesis. Aquello por lo que suplico para que nadie entienda (y sin embargo cruzo los dedos para que me fallen y tú lo sepas).
Una vez le hablé a mi hermana pequeña del amor ante su inmensa curiosidad y no nombre tu sonrisa. Recuerdo que en ese momento pensaba, que amor abarcaba mucho más que un beso de buenas noches. Le hablé de libros, películas, amistad, de los buenos momentos, del cariño de una madre... pero no dije tu nombre.Creo que ese pequeño secreto quería guardármelo para mí y solo vivirlo (o mejor dicho vivirte) yo. 

Amor eres tú.


Tanto si es conmigo, como sin mí. Aunque no podría decir lo mismo de mi misma.Te escribo, luego existo. Y cada palabra que plasmo tiene de subtítulo tu nombre.

martes, 27 de agosto de 2013

365 días.

Hace un año todo era tan distinto, tan ídilico. Demasiado conociendo mi historial de decepciones, y debería haberme percatado de que si toda mi vida se había tornado de color rosa era porque aún quedaba lo peor. Las interminables noches que acabarían conmigo, levemente.
Hace un año. Hace un año no era ni la mitad de lo que soy ahora, o puede que al reves. Puede que ahora no sea nada en comparacion a la que era. ¿Quien lo sabe? Yo no. Mis paseos por Prince St, tan loca por aquel chico como estaba. Qué ilusa. Que estúpida. Y a la vez que feliz. Daría lo que fuera por volver un segundo a aquel paraíso, a aquellos días maravillosos. Aquellos días en los que no quería ver la realidad, y así me fue de bien. (A ratos) Sobre todo aquel 28 de agosto, el día que comencé mi diario. El día que llegue al internado por primera vez, el día que conocí a esas personas que hoy tanto quiero. El día que, puede que sin darme cuenta, firmé mi sentcencia de muerte, con tinta transparente. La de mis lagrimas. Llegó octubre y su frio, el mío. Llegó octubre y con él, un infierno.
Pero hace un año, la chiquilla que era no sabía nada de nada. Caminaba feliz, ilusionada, entusiasmada. Soñadora. Ilusa. Puede que, hasta preciosa. Porque no hay mayor belleza que el brillo en la mirada cuando las cosas no te pueden ir mejor.


S.

domingo, 25 de agosto de 2013

A letter to my self~ part 2


And kid, you’ve got to love yourself. You’ve got wake up at four in the morning, brew black coffee, and stare at the birds drowning in the darkness of the dawn. You’ve got to sit next to the man at the train station who’s reading your favorite book and start a conversation. You’ve got to come home after a bad day and burn your skin from a shower. Then you’ve got to wash all your sheets until they smell of lemon detergent you bought for four dollars at the local grocery store. You’ve got to stop taking everything so goddam personally. You are not the moon kissing the black sky. You’ve got to compliment someones crooked brows at an art fair and tell them that their eyes remind you of green swimming pools in mid July. You’ve got to stop letting yourself get upset about things that won’t matter in two years. Sleep in on Saturday mornings and wake yourself up early on Sunday. You’ve got to stop worrying about what you’re going to tell her when she finds out. You’ve got to stop over thinking why he stopped caring about you over six months ago. You’ve got to stop asking everyone for their opinions. Fuck it. Love yourself, kiddo. You’ve got to love yourself.


miércoles, 14 de agosto de 2013


Era septiembre, y el sabor a sal todavia permanecía en sus bocas. Era septiembre. Eso significaba que el largo verano quedaba a sus espaldas, como una historia ya vivida. Eran tiempos duros en aquella polvorienta ciudad estadounidense, y mucho más para aquella joven de pelo corto y sonrisa dulce. Podía haberle ocurrido a cualquiera, pero por desgracia, le ocurrió a la pequeña Alice, tan tierna y tan frágil, como una muñeca de porcelana en una vieja vitria de cristal ¿Por qué ella? Debería haber sido yo, o tu, cualquiera, menos ella.

S.

domingo, 28 de julio de 2013

Morir de amor, ¿O acaso existe otra manera de morir?


-



"Gracias por escribirme, Sofía. Gracias por leerme y por alimentar de esta forma mis ganas de escribir. Es un placer recibir mensajes como el tuyo y ver que hay veces que la poesía sirve para algo. 
No sé si habrá situaciones mejores o peores, eso no importa. Lo que importa es que todo, a veces por suerte y a veces por desgracia, se termina. Los malos tiempos y también los buenos. Y, por supuesto, a veces por suerte y a veces también por desgracia, todo comienza. Y llega. Cumpleaños. Sueños. Experiencias. Imprevistos. En fin, la vida. Y si me dices que la compartes conmigo versos mediante, haces que algo acabe de comenzar para mí. Un poco. Aquí dentro. Es genial. 
Lo dicho, aprovechemos. Aquí y en los libros estoy para lo que quieras.Un beso,
Diego."

jueves, 18 de julio de 2013

Solsticio

Es verano, huele a verano, ¿No lo notais? Las noches interminables, el brillo en los ojos de la gente, como si el sol además de ponerlos morenos tuviese el fantástico poder de ponerlos felices, alegres. Porque no hay mejor antidepresivo que bañarse en el mar de madrugada, ir a la playa con resaca o perder por completo la noción del tiempo.

viernes, 5 de julio de 2013

Un apice de esperanza en este tunel sin salida.


"Todas las mañanas vengo de no hacerte el amor, de necesitarte toda la noche, de desayunar ingentes cantidades de desesperación. Vengo de ducharme con la impotencia, de lavarme los dientes con toda la desilusión del mundo, de afeitarme sin tu triste sonrisa en el espejo. Vengo, todas las mañanas, de recordar tu voz como quien se empeña en recordar un sueño, vestido con las mismas frustraciones de siempre, con las mismas esperas, con los mismos poemas; esos que nunca llego a terminar. Todas las mañanas, te digo, vengo a medias. Con la cabeza perdida entre dos mundos: uno sin ti, el otro sintigo. Peinado con el mismo sudor frío, calzado con las mismas historias de siempre. Vengo lleno de relojes, de taxis, de calendarios, de llamadas que no llegan, cartas que no llegan, trenes que no llegan. Vengo, todas las mañanas, cansado de no hacerte el amor toda la noche. De necesitarte sin descanso. De utilizar mi insomnio para imaginarte durmiendo a mi lado: sin fuerza, sin preocupaciones, sin gesto. Vengo agotado de no tenerte, de morirme todo el tiempo por tu culpa. Y aun así, ya lo ves, lo primero que hago es darte los buenos días."

miércoles, 5 de junio de 2013

Más gris que el cielo.

El viento despeinaba su cabello. Aquel precioso cabello rubio, lacio. Tenía frío. Mucho frío. Pero pese a eso siguió con la ventanilla bajada, observando. Meditando. El ambiente era aún más frío que el aire, así que la idea de abrir la puerta y lanzarse a la carretera aún brillaba en su cabeza. Pero no podía, o al menos, no debía. Deber. Obedecer. Tener que. Era lo único en lo que no quería pensar, pero tampoco deseaba hacerlo en el pasado, en el tiempo o en las sonrisas que dejaba atrás. La sonrisa para ser más exactos.

Una extraña canción sonaba en la radio. Hacía horas que no compartían una palabra, y no había mas sonido que los ronquidos de aquel estúpido perro en el asiento de atrás. Estúpido. Estúpido. Tenía tanto resentimiento guardado que aquel "chucho" era el único con quien pagarlo.

Subió un poco más el volumen. Se impregno de el sonido, del paisaje, del cielo, más gris que ella (sí se podía). Era noviembre, odiaba noviembre. Odiaba todo. ¿O todo la odiaba a ella? Qué difícil elección. Que difícil era todo entonces.Comenzar de cero es complicado. Abandonar una vida aún mas. Olvidar lo que has vivido es completamente imposible.


martes, 21 de mayo de 2013

Sin prisa.

-¿Sabes cual es mi momento del día?
Prométeme que no te reirás, solo a ti te lo confesaré. ¿Conoces esa sensación?, la  de estar aún mas dormido que despierto, calentito, sintiendo los pies rozando las suaves sábanas blancas, tu pelo despeinado por esa almohada que te conoce mejor de lo que tú lo harás jamas. Tu despertador aún no ha sonado, tu mente aún no ha despertado, tus ojos entreabiertos, tu respiración profunda...

Unos rayos de sol entran por la ventana, entre los boquetes de la persiana, y acarician tu rostro, bañándolo de ese rojizo tan peculiar de los amaneceres sureños. Esa sensación. La que tienes cuando sabes que pese a que el sol poco a poco sale de su escondite tú no tenes por qué hacerlo, puedes seguir en tu refugio aún un rato más. En apenas un par de minutos la vida te llamara, la rutina, la prisa, las apariencias, hasta ese personaje que te toque ser hoy se apoderará de ti para que lo interpretes un día más. Pero hasta entonces, los minutos convertidos en segundos eternos, segundos que vives sabiendo que solo durarán eso, segundos, son lo más parecido a la felicidad que he vivido jamás. Cada día la misma sensación, el mismo regalo que me hace el mundo para compensar mi desastrosa existencia. Y es que ojalá pudiese hacerlo, pudiese parar el mundo en uno de esos segundos, en los qué aún puedo dormir un poco más, en el que no hay prisa, no hay miedos, exigencias, errores o arrepentimientos.

Ese momento, mi momento. 


S.


jueves, 9 de mayo de 2013

A letter to myself. (IV-V-XIII)

Hoy es el día, el gran día. El día que llevo esperando seis meses. Seis eternos meses que podría resumir en mi enfermedad, en mi cabeza, en mis médicos y en mi miedo. Seis meses terribles, pero todo comenzó aquí. En el mismo lugar al que hoy voy, tanto tiempo después. El sitio al que este avión me lleva. El sitio al qué mi corazón ansia llegar, mientras que mi cabeza dice no tras no. Recordándome una y otra vez los malos momentos, obligándome a obviar los buenos. Pero por primera vez esa constante guerra cabeza-corazón tiene como ganador a este último, así que, a tantísimos metros de altura, he tomado la decisión, he pactado la promesa, otra vez, conmigo misma.
¿Recuerdas la promesa que hice este verano? Lo que me costó cumplirla, pero lo hice. Lo supere. Me supere. Y sino mira mis cicatrices, esas que no están en la piel. Y con un poco de suerte esta promesa no me dejara desangrándome por dentro como la última vez, porque tonta de mi, las sonrisas no son tiritas, no podían curarme. No lo hicieron.


S.

sábado, 27 de abril de 2013

Esperanzados

Una buena amiga me dijo una vez que ella había estado mucho tiempo sola. Bueno, sola nunca estuvo, siempre tuvo esperanza, siempre tuvo algo que ni tú ni yo tendremos. Jamás. Y la envidiaremos por ello. Y la odiaremos.
Porque la esperanza no es un sentimiento,ni un estado. Es un regalo. Quien tiene esperanza, fé en el futuro, tiene mas de lo que cualquiera podría desear. 

martes, 23 de abril de 2013

-Sofía, ¿cuando te vas a enterar que esto no es Anatomía de Grey? 
Duelen, las palabras, y dolieron y sé que dolerán. Pero no por su dureza, si no por la  verdad que ocultan, la misma que yo intente esconder, no ver. Pero que ahí esta, que siempre estuvo. Gritándome. 

-Joder, esto no es una película, es tu vida, la tuya, y tienes que empezar a vivirla. 
Duele todavía más. Vivir. Me parece algo tan imposible, una utopía imposible de alcanzar, al menos para mí, al menos para la persona en la que me he convertido, en la que mi mente me a echo ser, la misma a la que odio, a la que detesto, a la que daño, sin darme cuenta que no es más que dañarme a mí misma, a la que fui, que sigue dentro de mí, por alguna parte perdida, puede que buscando una salida, o puede que demasiado asustada como para hacerlo siquiera. 
Vivir.
Quiero vivir. Quiero empezar a hacerlo. Quiero conseguirlo. Quiero sonreír, pero sonreír espontáneamente. Sonreír con el corazón y no con la cabeza. Sonreír sin que las ojeras del pánico asomen por mis ojos. Sin que tenga que recordarme una y otra vez por que sonrió. Sonreír como medicina, como cura, como salvación. Sonreír como modo de sobrevivir, un día más. Solo uno más.

S.


lunes, 22 de abril de 2013

YOU MUST STAY GONE

Leaving is not enough. You must stay gone. Train your heart like a dog. Change the locks even on 

the  house he’s never visited. You lucky, lucky girl. You have an apartment just your size. A bathtub 

full of tea. 

heart the size of Arizona, but not nearly so arid. Don’t wish away your cracked…"

jueves, 28 de marzo de 2013

Medio mundo, mil canciones y un espejo …



No es mentira  que te hiciste enemiga de la suerte clandestina, mirada hundida. Si te olvidas un instante y miras hacia delante, no me dejas piropearte sin echarte a llorar, sin decir que no es verdad. A veces te mereces medio mundo, mil canciones y un espejo que no te engañe. Cenicienta, princesa en potencia. Te has metido en medio de un laberinto, rodeada de fantasmas, mariposas que no tienen alma y vuelan a suspiros. Y tu sueñas con lo mismo, al borde del precipicio. No confías en mis halagos, compadeces mis abrazos. Ríe, canta, baila, posa, siéntete preciosa. A la mierda esas tonterías, bienvenida a la vida. 

No te engañes, solo veo menos de media sonrisa. ¿Para qué vas a robarte tiempo a ti misma? 





La canción culpable de todas y cada una de mis lagrimas. Arte.
S.

miércoles, 20 de marzo de 2013

It´s the first day of Spring and my live is starting over again.

Maybe he felt he was losing himself, or maybe he wants to get her back, because hes still hoping one day she may come back.



There’s a hope in every new seed
And every flower that grows upon the earth
And though I love you, and you know that
Well I no longer know what that’s worth
But I’ll come back to you in a year or so
And I’ll rebuild, be ready to become
Oh the person, you believed in
Oh the person, that you used to love.


domingo, 10 de marzo de 2013

La mentira como forma de vida, fingir para sobrevivir.

Niegamelo. Sé capaz. Pero mirame a los ojos mientras lo haces. Mientras me mientes obviando lo que es más que evidente, que tienes tanto miedo como yo, que te cuesta vivir y te duele respirar. Que has dejado de soñar.
Niegalo. Cubre tus heridas en lugar de curarlas, deja que te hagan mas y más  débil. Hasta que ya no seas capaz ni de negar, a nadie, a nada. 
Te acostumbraste a la mentira como forma de vida, a fingir para sobrevivir, aunque sólo fuese un segundo más, un pequeño instante.

miércoles, 27 de febrero de 2013



Y recordar que siempre te quise con tristeza, con sensación de pérdida, con lejanía. Haber vivido en ese limbo, en un eterno triste san valentín, y haberte querido tanto y tan maniáticamente que aún ahora me duele recordarlo. Haberte querido como ese amor que solo se ve en películas como esa y que yo ya nunca volveré a tener, las puertas están cerradas para eso, para esa locura y descontrol que te saca de ti mismo y te hace hacer hasta lo inimaginable.

El amor como ese te deja con agujeros por todos lados, deudas en la cartera, huecos en los pantalones, bolsas de cosas de las que deshacerse y heridas que nunca cierran del todo y se abren cuando ves algo que te hace volver a vivirlo todo otra vez. Desde el principio.

S.

Julien Janvier

"Los amigos son como las gafas, que te hacen parecer inteligente pero enseguida se rayan y cansan. Afortunadamente uno encuentra unas gafas que molan, yo por ejemplo, tengo a Sophie"
 S.

domingo, 3 de febrero de 2013

'Y seguiremos aferrandonos al pasado porque al fin y al cabo aunque ahora nos quite la vida, antes nos la dio.'

¿Y si las palabras la habían abandonado? Era como si su pequeño y cálido corazón hubiese dejado de latir de forma temporal, y nadie supiese cuando volvería hacerlo. ¿Y si ya nunca más volvía a ser la chica de los ojos verdes? La misma que vivía la vida, sin esperar que la vida la viviera a ella. En cada uno de sus dorados mechones de pelos encontrarías y poemas de amor, y en sus brazos mas canciones desesperadas de las que nunca nadie pudo escribir. Lo que nadie sabía, ni siquiera él que tanto la había querido, era que encontraría tras sus besos. Y por desgracia, ya nunca lo averiguaría.


S.

viernes, 11 de enero de 2013

— Noah and the Whale


Last night I slept with a stranger
For the first time, since you’ve gone
Regretfully lying naked, I reflect on what I’ve done
Her leg still forced inbetween mine, sticking to my skin
Stroking my chest and my hair, head resting below my chin
I’m a fox trapped in the headlgihts
and I’m waiting, for the tires to spin over me
 
Cause everything I love has gone away
Oh, cause everything I love has gone away


S.


Por los lunes que te debo.

S.

Blues del atardecer.


De pie en el umbral de la puerta de tu cocina,
fumando otro cigarrillo,
te miro mientras preparas una taza de café.

Tu pelo hacia atrás,
aún húmedo de la ducha
y tu cara limpia
sin el maquillaje de anoche.

...
Los dos descalzos.

Los dos callados.

Los dos con resaca
de la noche anterior
y agotados de
hablar y discutir
y hablar y discutir
todo el día.

Anoche todo era fácil,
cuando estábamos borrachos
y calientes
y todo en el mundo tenía sentido.

Mañana por la mañana
tengo que volver a casa
y no sé si quieres que me quede
o me vaya
y, quizás, tú tampoco lo sepas.

Veo a lo lejos una tormenta de relámpagos
en el cielo púrpura del atardecer
y escucho la lluvia suave
contra el tejado.

Nos miramos el uno al otro
desde los extremos de la cocina,
sin decir nada
y apartamos la vista.

Pienso en un antiguo blues
y lo canto para mí,

Quiero abrazarte, nena,
pero no sé qué decir.
Quiero besarte, nena,
pero temo que me rechaces.

y quisiera que pudieras oírme

y quisiera poder oír el blues
que cantas para ti.

"Dave Alvin."      S.